Una de las principales reglas para conseguir éxito en el sector de la restauración y hostelería es innovar, sorprender y ofrecer la mejor calidad y el mejor servicio al comensal.
Dejando a un lado el importante y fundamental servicio diario del año en la sala, un aspecto esencial en la temporada de verano es el servicio y la imagen que se ofrece en el área del Buffet.
La singularidad del espacio, su equipamiento y la presentación de los platos es la clave para marcar la diferencia ofreciendo una experiencia única a los comensales.
Apostar por un diseño original y con personalidad en la presentación de los alimentos, ofrecer el servicio de una manera elegante y moderna, y evidentemente seguir y materializar el cumplimiento en las normativas vigentes.
Es fundamental que el consumidor esté cómodo y a gusto en el espacio, que encuentre apetitosos los platos que están a su disposición, pero además también tiene que estar muy bien informado de los alimentos que están a su alcance, sobre todo aquellas personas que sufren algún tipo de intolerancia o alergia a algún alimento, según la Reglamentación Europea Inco. Para y por eso, es imprescindible la señalética en el Buffet. El marcaje y la señalización de los alimentos debe ser clara y en varios idiomas.
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